Dugin en Shanghái (IV): China en las Relaciones Internacionales

Traducimos la última conferencia del Profesor Alexander Dugin en Shanghái, China. Traducción realizada por Juan Gabriel Caro Rivera.

China en las Relaciones Internacionales: geopolítica, globalización y hegemonía

La conferencia de hoy estará dedicada a la identidad china en los diferentes campos de la ciencia. En la primera conferencia expliqué la estructura principal de la ciencia de las relaciones internacionales, sus conceptos principales, teorías, escuelas y debates. En la segunda conferencia expliqué que era la geopolítica. Hemos explorado la perspectiva geopolítica del Poder del Mar vs el Poder de la Tierra. En la tercera conferencia expliqué la multipolaridad y la teoría multipolar, en la cual insistimos que deben haber más de 4 polos o al menos 4 polos – los Estados Unidos, China, Rusia y Europa – y no un solo polo, el Occidente. Hoy, intentaré poner a China en todos estos campos de investigación para comprender mejor qué es China en estos tres contextos.

Primero vamos a aclarar la principal y más importante, diría yo, pregunta: ¿Qué es China? Pero no podemos empezar por la parte para comprender el todo, porque no podemos entender el significado de las partes sin conocer el todo. Usaremos el método filosófico de la hermenéutica para poder descubrir que es China a través de este proceso. No sabemos que es China – nadie lo sabe. China es un misterio. No vamos a revelar o explicar este misterio, sino que vamos a entrar en este misterio, intentando pensar acerca de la identidad china, y poner la identidad china en un contexto filosófico, geopolítico e intelectual diferente, encontrar el lugar de China en el mundo, pero al mismo tiempo definir qué es China en el mundo. El mundo es el todo, mientras que China es la parte, pero sin saber qué es China o qué es el mundo, no podremos encontrar su lugar. Vamos a entrar juntos en esta aproximación hermenéutica de Schleiermacher.

Formularemos algunas hipótesis sobre qué es China, después de la cual haremos alguna clase de comprobación de la realidad. No es una definición dogmática de China, sino una especie de presunción o aproximación fenomenológica. Para entender esto necesitamos hacer algunas importantes declaraciones. Cada declaración aquí es de crucial importancia.

China es una civilización. Obviamente no significa que es la única, ya que existen otras civilizaciones fuera de China. China es una de muchas civilizaciones. Siendo una civilización, China representa algo completo y perfecto, autónomo y autosuficiente. Al ser una civilización significa que debe ser evaluada desde adentro, no desde afuera. Una civilización puede evaluar su control y definir sus propios valores, progresos o fracasos usando sus propias herramientas. Civilización significa muchas cosas. Es el más alto punto de un concepto complejo e integral. Es algo que el profesor Zhao Tingyang, a quien conocí en Pekín y el cual admiro, llama Tianxia (天下). Tianxia (天下) no es un país, sino un sistema o civilización.

En la geopolítica, China es un Gran Espacio. Por ejemplo, Canadá que es un gran país, no es un Gran Espacio, porque no representa este gran espacio como algo unificado, centralizado o unido históricamente. Norteamérica es un Gran Espacio, no Canadá. No todo gran espacio geográfico es un gran espacio geopolítico, pero China si lo es. China controla históricamente una gran zona geográfica que esta unificada política, social, cultural, histórica, religiosamente, unificada por la escritura, la identidad Han y demás.

China es una cultura. La cultura china es mucho más que el Estado chino, porque el pueblo de Taiwán y algunos pueblos no chinos o Han comparten más o menos la misma cultura, tal como los vietnamitas, coreanos y parcialmente los japoneses. Sus identidades y culturas se formaron bajo el enorme impacto e influencia de la cultura china. La cultura china es algo -supra-chino, algo más que china, tal como su sistema de escritura, por ejemplo.

China es un poder, porque tiene recursos políticos, económicos, demográficos, geopolíticos, estratégicos y militares. Puede obligar a otros a hacer cosas. Si alguien ataca a China, los chinos pueden defenderse. China es un poder que puede defender su soberanía.

China es un poder en el sistema multipolar. Explicaré después qué significa esto en concreto. Cuando hablamos de la multipolaridad, inmediatamente pensamos en Occidente como un polo sin ninguna duda, siendo una civilización, un poder y un Gran Espacio. Pero junto a Occidente, China es el siguiente polo más importante del mundo.

China es hegemónica, pero obviamente China no es solo hegemónica o una fuerza líder. Existen otras fuerzas hegemónicas además de China. China es una hegemonía regional. Puede liderar y ejercer su liderazgo alrededor de los países que lo rodean, pero no más allá. Es al mismo tiempo un espacio definido, una cultura, una civilización y un poder. China es una especie de centro hegemónico que, comparado con otros países que están a su alrededor, es una fuerza verdadera de liderazgo.

China es un Imperio, no solo en un sentido tradicional, sino también en cuanto a unidad nacional, política. Un imperio no es solo un estado político, sino algo más – un sistema. El Tianxia (天下) puede ser utilizado aquí. Es algo que define mucho más que un sujeto político y puede expandir su influencia sobre un gran espacio.

Además, China es Tianxia (天下).                   

Todas estas definiciones no pueden ser consideradas en su sentido absoluto, ya que todas esas definiciones pueden ser aplicadas a China solo si la usamos en “varios sentidos, no en uno solo”. Es una civilización, pero existen otras. Es un gran espacio, pero no el único. Es una cultura, pero no la única. China es un poder, pero existen otros. China es un polo, pero existen otros muchos polos. China es una hegemonía, pero existen otras hegemonías. China es un imperio, pero existen otros imperios. Es precisamente lo que nosotros, siguiendo a Zhao Tingyang, hemos definido como Tianxia (天下). Lo explicaré después, pero en mi opinión me distancio de Zhao Tingyang en que China es solo uno de los posibles Tianxia (天下), no el único, sino que existen muchas otras estructuras globales. Por ejemplo, existe el concepto de mundo global norteamericano; podemos imaginar el concepto multipolar de un mundo global y existe el aporte chino a la globalización en la forma de una organización mundial basada en la teoría del Tianxia (天下 体系). Podemos entender este proyecto como uno de varios. Zhao Tingyang, quien es el fundador y autor de la teoría del Tianxia (天下 体系), ha dicho que su concepto ha sido copiado por un profesor norteamericano que ha escrito un libro sobre el Tianxia norteamericano. Según este profesor solo el Tianxia norteamericano sería verdadero mientras que el chino sería opcional. Esto significa que puedes proponer tu propio sistema internacional, pero eso no significa que será aceptado por todos los demás, al menos teóricamente. Existe una lucha por el Tianxia (天下). Esto es importante, porque significa que los expertos norteamericanos han comenzado a tomar prestados conceptos chinos – ese es un signo muy positivo, un verdadero signo de multipolaridad.

La identidad tradicional China puede ser sumada a otras definiciones. Hablamos de la identidad cultural. El sistema Ying-Yang (陰陽) está basado en algunas proposiciones importantes, ejes o leyes. Las relaciones son más importantes que las unidades ontológicas. Lo importante no es que una cosa sea una cosa y no otra, sino como se relacionan la una con la otra – las relaciones y la relatividad de las cosas, más que las cosas en sí mismas, porque no hay esencias eternas. No es esencialismo. Las cosas cambian y las relaciones entre ellas también. Pero las relaciones son más estables que las cosas mismas. Esa es una perspectiva completamente no-Occidental. El Occidente piensa que las cosas o las esencias son más importantes que las relaciones. Las relaciones pueden cambiar, pero las cosas no. China piensa lo contrario. La naturaleza puede ser flexible, pero las relaciones permanecen. Ese es el concepto de las relaciones en el Ying-Yang (陰陽). Esa es la teoría del Ying-Yang (陰陽). Las relaciones son eternas. La armonía prevalece. La armonía es balance, no la victoria del Ying sobre el Yang, ni la victoria del Yang sobre el Ying. No existe una oposición radical entre las dos. Existe una clase de juego. Todos los opuestos son relativos.

El orden está basado más en la ética que en el poder. La ética es lo más importante de todo; es un balance y un reconocimiento de las reglas de “juego”. La ética no es el resultado de un balance de poder, como lo es en Occidente. No existe la subjetividad pura ni la objetividad pura. Es la aplicación del concepto de que las relaciones prevalecen. No existe el sujeto cartesiano Occidental, ni el objeto Occidental. Existe algo subjetivo en la naturaleza, en la cultura humana. No puedes trazar una línea radical de separación como Occidente. Esa es la razón por la que los chinos tienen gran admiración por las piedras. Las piedras han sido hechas por la naturaleza. Ustedes ven elementos subjetivos en las piedras, por ejemplo, en el templo de Confucio aquí en Shanghái el cual visite con el Dr. Wang Pei. Esas piedras son consideradas obras de arte, porque la naturaleza es artística y el hombre es un trozo de la naturaleza.

El Dao (道) está en todas partes y en ninguna. No puedes decir que haya un Dios, Belleza o un valor más importante. Cuando muestras tus ideales los pierdes. Cuando hablas, pierdes las palabras. Es una especie de apreciación del silencio. Como el Dr. Pei Wang dijo, si escuchas en silencio con cuidado, podrás escuchar los truenos. Si tú dices que el Dao (道) está en todas partes o en ninguna, es una mentira. El Dao (道) está afuera, como el valor más alto que abarca y rodea todas las cosas y es el centro de las cosas. Es relacional.

La materia y el espíritu son una clase de “doblez”. Puedes partir de la materia y llegar al espíritu. No existe una división estricta entre alma y cuerpo, porque la materia y el espíritu no son opuestos, sino relativos. Son cosas que no puedes definir radicalmente como si “aquí estuviera el cuerpo y aquí está el alma”. Están entremezcladas en alguna forma. Así que no solo te preocupas por tu cuerpo, porque cuidando tu cuerpo, cuidas tu alma y viceversa. Ese es el principio del Tai Chi (太极拳). Es la forma en que los chinos comprenden las cosas.

La simetría prevalece en la identidad china del Centro vs la periferia, no lo Alto vs lo Bajo. El centro está el Emperador Amarillo Huangdi (黃帝) y existe la periferia. Pero no existe una oposición radical entre Arriba vs Abajo. Sino que se trata de la concentración y la degradación ontológica de la concentración.

Los extremos son peligrosos. Cuando llegas al extremo, pierdes la relación con el todo. Yendo al extremo, pierdes la relación con el Ser, el Dao (道), la armonía y el juego de las proporciones.

El tiempo es circular, no lineal. El año comienza en el mismo punto donde tu comienzas, el Año Nuevo.

Es inclusivo, no exclusivo.

Estas son las principales características de la identidad china. Cuando vemos la identidad Occidental, perdemos algo muy importante, estos dos puntos: el Ying y el Yang.

Llegamos a un dualismo radical que es completamente diferente de la identidad china. Si intentamos describir el Occidente, no lo chino, veremos casi inmediatamente las diferencias en su totalidad: las relaciones son secundarias, son más importantes las esencias; la competencia y la lucha prevalecen, no la armonía; todas las oposiciones son radicales e irreductibles. Por ejemplo, no puede existir un término intermedio entre el Bien y el Mal. Existe una línea divisoria en toda esta estructura de la identidad no-china. El orden se basa en el poder, no en la ética. El poder es primero, mientras la ética es algo secundario. Existe la subjetividad pura y/o la objetividad pura – todos los sistemas del pensamiento Occidental se basan ya sea en el idealismo subjetivo, el cual niega radicalmente la realidad del mundo exterior, o el materialismo objetivo, en el cual el sujeto es el reflejo o el espejo de la materia. El sujeto y el objeto están siempre por fuera en la cultura y filosofía china.

Trascendencia con Dios o sin Dios. La trascendencia es la ausencia de algo común entre el creador y la creación. Este es un aspecto básico de la religión monoteísta: Dios es trascendente, lo que significa que es incompatible con la realidad. Solo Dios es; la realidad no es. En la versión materialista se produce lo mismo: solo existe la realidad; Dios no existe. Es la versión moderna de la misma actitud trascendental. En el sentido moderno, solo existe la realidad material. Como Nietzsche decía, Dios ha muerto – lo hemo matado. Así que la trascendencia prevalece en la normativa teológica de las religiones monoteístas o sin ellas.

La materia y el espíritu son dos naturalezas. Ese es un principio absoluto de la identidad Occidental.

En términos simétricos se encuentran el arriba y el abajo, las diferentes clases de jerarquías y taxonomías, en la cual todo se incluye en una única línea vertical. Arriba está el todo; abajo está la nada. Arriba está el Paraíso; abajo el Infierno.

Los extremos son constitucionales y muy importantes para la identidad Occidental, porque crean el espacio, porque son primero.

El tiempo es lineal. El tiempo es una flecha. El tiempo no es circular, y por lo tanto los acontecimientos nunca, o muy rara vez, se repiten. La diferencia entre los acontecimientos y las estaciones es que los primeros no se repiten.

El pensamiento es exclusivista, no inclusivista, significa que la realidad la organizas estableciendo marcadas diferencias entre los elementos. La única forma de entender algo es analizarlo. ¿Qué es analizar en griego? Es dividir, separar. Para entender algo, debes matarlo y separarlo en partes, y después tratar de recombinar o revivir el sistema muerto.

Eso es dualismo. La cultura china no es dualista. Esto es importante, porque significa que la identidad china es claramente no Occidental, pero tampoco es sub-Occidental o será Occidental. Es una organización del mundo diferente sobre bases diferentes.

Ahora veremos qué tan profunda es la identidad China. Cuando hablamos del Estado chino, 中国 (Zhōngguó), podemos decir que existe una identidad nacional apoyada por un Estado chino. Esto significa que todo lo que he mencionado antes existe solo porque existe un Estado, el Estado confuciano, el Estado Imperial, el Estado comunista – a través de toda la historia china ha existido un Estado que ha promovido estos valores, los valores de la cultura china, con un sistema educativo, tradiciones y modos de vida – todo basado en la continuidad de la identidad china. Pero cuando vamos a un barrio chino (唐人街) en Occidente, no existe el Estado chino. No necesitamos seguir este camino más y podemos aceptar fácilmente los valores de otras culturas. Algunas veces no hay obstáculos. Pero en Washington, hoy día – estuve allí en el 2005 – cerca a la Casa Blanca, se encuentra un enorme barrio chino – con restaurantes chinos, nombres chinos, comida china y chinos hablando chino. No están obligados; no existe un Estado que los obligue a ser chinos, pero prefieren seguir siendo chinos. Por lo tanto, existe algo más que una identidad construida artificialmente. Estamos hablando de algo mucho más profundo. Si creemos que cambiando el Estado chino ustedes adoptaran otra cultura, entonces el barrio chino demuestra que no es así. Algunos chinos viven diez, veinte o treinta años en el extranjero y al regresar a China siguen siendo devotos del Partido Comunista, de la identidad china y del confucionismo.

Esa es una identidad muy resistente. La identidad no es solo el Estado, una nacionalidad y la educación; es algo más profundo. La identidad china puede ser preservada, desarrollada, afirmada y conservada en diferentes situaciones y sociedades. Existe una importante relación dialéctica entre los chinos en China y los chinos del extranjero. La identidad china puede existir fuera del Estado y si le preguntamos a cualquier chino ahí afuera que orden prefiere, es casi seguro que prefiera el orden y estilo de vida chino. Es algo existencial. Lo “chino” está definido por la cultura china, no por lo de afuera, las estructuras externas del Estado o la sociedad. El significado de la identidad china es algo que ya está incluido. Afuera, las cosas pueden cambiar, mientras que adentro existe un balance – son las relaciones-estados. Por ejemplo, puedes modernizar una parte de tu sociedad, pero otra parte se conservará para mantener un balance. Eso es flexibilidad, no radicalidad; esta es la inclusividad, basada sobre las relaciones, de la muy estable identidad china. Es eterna como las estaciones o el Mandato del Cielo – pueden perder a su emperador o su sistema, pero seguramente encontrarán otro. Volverán al mismo punto y comenzarán el siguiente ciclo, el siguiente año.

Lo que conseguimos con este análisis, al comparar el Estado chino y el barrio chino, es que la identidad china es profunda en ambos. El Estado chino y los chinos que viven en el extranjero poseen un principal denominador común. Llamo a esto el Dasein chino (汉的此在). Dasein (此在) es un término de Heidegger. No creo que debamos utilizar el término Zhōngguó (中国), porque es demasiado político, nacionalista o relacionado con el Estado. Deberíamos usar el término Han (汉), que es el núcleo del Dasein chino (汉的此在). Podrían transformar en nómadas a los Han del Norte o a la población del Sur de China, pero los Han son el núcleo de la identidad china. El Ser-Han es ontológico y existencial.

Podemos describir el Dasein (此在) chino usando el método de Heidegger en términos del Ser-chino. Ustedes no pueden ser sin ser primero chinos. Siendo chinos ustedes entienden cuál es el significado del Ser chino, pero sin tener todavía acceso a este entendimiento existencial. El Ser-en-el-mundo, Im-der-Welt-Sein, se puede traducir aquí como el Ser-en-el-mundo-chino. La palabra china no es Zhōngguó (中国), el Estado chino, sino el mundo que ustedes interpretan, ven y crean en el curso de su interpretación. Ustedes pueden vivir en el mundo chino mientras estén dentro o fuera de China. Ser-con, Mit-Sein en alemán, otro concepto de Heidegger, es el núcleo de la identidad china, como ustedes no pueden estar solos, sino siempre rodeados de otros chinos. Ustedes están con su familia, sus ancestros, con el Otro, con el sistema de escritura chino, sus pensamientos. Ese es el diálogo chino. Ustedes están siempre con. ¿Con qué? Con algo chino.

El Ser-Hacia-la-Muerte-chino es la definición más radical del Ser-ahí, el Dasein (此在). Una vez, hablando con el último discípulo vivo de Heidegger, el profesor Friedrich von Hermann en Friburgo, dije que creía en la multiplicidad de los Dasein – que no existía un Dasein único para todos, porque existen diferentes culturas y cada una tiene su propia descripción del Ser-ahí. Él dijo que Heidegger no lo aprobaría, porque él creía en la universalidad del Dasein (此在), y argumentaba sobre la universalidad de la Muerte. Le respondí: “¡Para nada! En diferentes culturas existen diferentes muertes”. Para los ateos la muerte es el fin de todo. Para los cristianos la muerte es el paso necesario del alma y el viaje post-mortem al Cielo y el Paraíso. Existen experiencias completamente diferentes. Creo que existe o debe existir una comprensión china de la Muerte inscrita en la cultura china del retorno de los ancestros. La familia, la casa, la tradición son más importantes que la Muerte. Entrar en la Muerte o venir al mundo, existe una especie de rotación circular. No es una interrupción de la continuidad. Siendo ruso, podría hablar más acerca del significado y el modo de morir ruso, pero creo que deben explorar este existencial del Dasein chino (此在) más.

En cuanto, al Logos chino, resulta la parte más evidente de la identidad china porque es explícita. Si la identidad existencial es implícita o está oculta en la existencia, siendo el nivel básico de presencia en el mundo, entonces el Logos por el contrario es bastante claro. En la sociedad tradicional tenemos el Logos chino con Confucio, Lao Tsé y el budismo chino – estos son los tres grandes sistemas de la cultura y la sociedad tradicional china. El Tianxia (天下) es un concepto tradicional, no inventado por el profesor Zhao Tingyang. En el texto de Zhuangzi hay un capítulo llamado Tianxia. Es el 33rd y última división tradicional de todo el libro (el capítulo de miscelánea —雜篇 Zapian).

Sobre el orden ético y meritocrático. El profesor Daniel Bell ha escrito un muy interesante libro sobre el modelo meritocrático chino, el cual les recomiendo – “El modelo chino: la meritocracia política y los límites de la democracia” [1].

Y así encontramos un sistema de desarrollo explícito de cómo comprender la identidad básica a nivel del Logos. Todas las definiciones que usamos al comienzo pueden encontrarse aquí, con riquezas, con detalles, en los libros, los sistemas y las escuelas. Esta es una gran herencia cultural e intelectual basada en la identidad china.

En la sociedad moderna ustedes tienen otra forma del Logos chino: Mao Zedong, el socialismo y la modernidad china son una nueva forma del Logos chino adaptada a los nuevos desafíos históricos. En la actualidad, esto es tan importante como la herencia tradicional de la identidad china. Son nuevos nombres para las cosas. Confucio decía que debemos mejorar los nombres de las cosas. Mao Zedong ha mejorado algunos nombres adaptándolos a la realidad sin destruir las relaciones entre las cosas, mientras continúa existiendo la identidad china. A esta situación Deng Xiaoping añadió a esta perspectiva algunas características nuevas, como la apertura hacia Occidente – pero no para renunciar a su identidad, sino con la flexibilidad para favorecer su identidad, siguiendo siendo chinos en un nuevo mundo global.

No es la globalización la que utiliza a China. Es China quien trata de usar la globalización. Esto es muy interesante, pero también muy peligroso, porque al abrirse a un mundo que no es chino y que organiza de un modo completamente diferente los conceptos y valores, es fácil perder la identidad. Tal vez no para ustedes, pues hemos descubierto que son lo bastante fuertes para aceptar este desafío. Esa es la diferencia entre la historia rusa y china. La identidad rusa no es tan fuerte. Al abrirnos a Occidente, nosotros fallamos, perdimos nuestro país y casi perdemos nuestra alma. En el último momento, Putin apareció. Nuestra situación era extremadamente crítica en los años del 1990, y al entrar en la globalización, la aceptamos con demasiada facilidad, permitiéndole entrar demasiado en nuestro interior y por eso nuestra sociedad casi fue destruida.

Ahora, volviendo al futuro de la sociedad china, se produce lo que llamó la Gran Síntesis de la sociedad tradicional y moderna. Eso es lo que el camarada Xi Jinping dice. Él habla del sueño chino. El sueño chino no es una imitación del sueño americano, con el consumo y la comodidad, sino que es un sueño para reafirmar su identidad eterna en nuevas condiciones, uniendo la sociedad tradicional con sus valores y la sociedad moderna. Eso es confucionismo con maoísmo – la tradición de la China antigua y la China moderna. Esa sería la China postmoderna o el futuro chino. Ese es el Logos basado sobre el Dasein chino (此在).

Para reforzar y darle fuerza a este futuro Logos de la identidad china, ustedes pueden usar algunos autores europeos que son muy críticos con el Logos europeo y la modernidad europea, los cuales son muy útiles para comprender el Occidente.

René Guénon, el fundador del Tradicionalismo y su defensa de la sagrada tradición y la crítica radical a la modernidad son importantes para poder defender sus valores tradicionales, tales como el taoísmo, el budismo y todas las tradiciones de su sociedad. Es una defensa de la sociedad tradicional.

Pueden usar la nueva ontología u ontología fundamental de Martin Heidegger, la cual ya está siendo usada por la sociedad china como observó con gran placer, y estoy feliz de que Heidegger sea bien conocido aquí. Es algo valioso e importante.

El realismo político de Carl Schmitt les ayudará a comprender varios aspectos del pensamiento político Occidental.

También les recomiendo las ideas de la Nueva Derecha, el Eurasianismo, la geopolítica, la sociología de la jerarquía (antes que nada, al sociólogo francés Louis Dumont) y los conceptos de la Revolución Conservadora.

La Gran Síntesis debe incluir elementos revolucionarios y tradicionales. Todos ellos considerados desde la Derecha, pero también desde la Izquierda, pienso que el anticapitalismo y la ética anticapitalista de Karl Marx son muy importantes, tal vez no los aspectos técnicos de su pensamiento los cuales son anticuados. El anti-imperialismo es un concepto muy importante también. Mao Zedong, como el fundador del socialismo chino, incluyó a los campesinos y la sociedad tradicional en la clase revolucionaria, mientras en Rusia Lenin excluyó a los campesinos de la clase revolucionaria. Esa fue una de las razones del genocidio del pueblo ruso. Ustedes fueron mucho más listos.

Y les sugiero a Antonio Gramsci, muchas de sus ideas, como el cesarismo, son muy importantes ahora y aplicables a la situación actual. El pacto histórico de los intelectuales y el concepto de hegemonía de Gramsci son muy útiles también.

El siguiente paso sería China en las Relaciones Internacionales (RI).

El liberalismo en las R.I. está basado en el dominio de amplio espectro de los valores Occidentales. No nos equivoquemos aquí. Todas las teorías clásicas del Liberalismo en las R.I. están basadas en la idea de que los valores Liberales Occidentales deben prevalecer a nivel mundial. No tendrán la opción de tener una identidad china o una soberanía china en esta teoría, porque el Liberalismo en las R.I. dice explícitamente que los Estados Nación deben disolverse, la disolución de todas las formas de identidad colectiva en favor de un solo tipo de identidad – la individual – y que debería existir unas estructura o institución internacional por encima de los Estados cuya autoridad sea reconocida como ley.

Eso implicaría el fin de China no sólo como Estado, sino también del barrio chino – la identidad china como comunidad. Tarde o temprano, los liberales se darán cuenta de que los chinos prefieren su identidad cultural y entonces la atacaran, intentando destruirla. No se trata de algo religioso, pues todas las religiones en Occidente ya han sido más o menos destruidas por el Liberalismo. Cuando los Liberales se den cuenta de que en la identidad china no hay algo muy Occidental e individualista, entonces comenzaran a atacar no solo al Estado, sino también a la cultura china.

El Liberalismo en las R.I. excluye a China. Es inaceptable. Es una proyección de la hegemonía Occidental, del sistema de valores Occidentales y el modelo unipolar el cual, a los ojos de los liberales, debe ser impuesto a escala global.

El Realismo en las R.I. es Occidentalocéntrico y moderno, pero al menos reconoce el derecho de China a preservar su soberanía. El Realismo no se preocupa por los detalles de la civilización. La civilización no les importa a los realistas. En cambio, los realistas piensan en que, si tienes el poder para defenderte, entonces debes ser tomado en cuenta. Es un poco mejor que el Liberalismo. Competirán contigo, quizás te declaren la guerra, propongan una alianza o la paz, pero a priori no piensan en la destrucción de China como el Liberalismo.

El Marxismo en las R.I. es completamente diferente de lo que ustedes piensan que es. No se trata de la política internacional soviética o china. El Marxismo en las R.I. está basado en la idea de que el Estado Nación debe ser disuelto y el capitalismo global debe prevalecer; todas las sociedades deben ser destruidas y la humanidad transformada en dos clases sin nación, identidad, Estado o tipo de civilización. Es el cosmopolitismo. La población mundial debe ser mezclada en todas sus culturas, pueblos, grupos étnicos para crear un Estado postnacional, post-étnico, una confusión postnacional de todas las razas y grupos étnicos, para dividirlos en dos clases: el proletariado global y la burguesía global. Este análisis es aplicado a las R.I. por Wallerstein.

En el sistema global de Wallerstein, debe haber una transformación del mundo global con un centro en los países desarrollados y una periferia en los países subdesarrollados. Junto a ellos, China, Rusia, la India, Brasil y la semiperiferia debe ser destruida, pero la oligarquía, la parte capitalista de estos países semiperiféricos debe integrarse en la élite global, y los demás deben volverse más o menos pobres. La inmigración es un concepto ideológico para promover esto, una herramienta para acelerar el proceso. A través de la inmigración en masa, se transformará el mundo en una estructura cultural homogénea solamente dividida por la diferencia entre ricos y pobres – y después de ello comenzará la revolución proletaria global. En pocas palabras, el Marxismo en las R.I. está al servicio de los Liberales porque piensa que debe prevalecer el capitalismo primero. Y considera que el estalinismo, el sovietismo, el socialismo ruso, el socialismo chino y el maoísmo nos son auténticos experimentos socialistas, sino alguna clase de “nacional bolchevismo” o “marxismo nacionalista”. También consideran que ustedes no son socialistas, sino una especie de Estado nacional-burocrático totalitario dominado por una elite política que debe ser destruida. Los marxistas en las R.I. no son amigos. Cuídense de estos “marxistas” e “izquierdistas”. Son la quinta columna de los liberales en las R.I. China no tiene nada que hacer con ellos.

La escuela inglesa es más interesante – sobre todo el estudioso de las R.I. Barry Buzan. La escuela inglesa cree que no debe haber un gobierno global, como insisten los liberales, sino leyes establecidas por un club. Los países más poderosos, como club, aceptaran algunas reglas y relaciones en una especie de constitución del club. Un club no es una autoridad, sino una cuestión de auto-respeto y posición social, no es algo que tu estas obligado a seguir. No estás obligado a seguir las reglas de un club, en cambio las aceptas para incrementar tu status. Los “Grandes Países” del G20 y el G7 son un club. Sus decisiones no son obligatorias, pero es importante seguirlas. Si alguien es expulsado del club, como Rusia, después de Crimea, se supone que debes estar “avergonzado”, no en el sentido de una autoridad moral que pueda castigarnos como criminales, sino por “una clase de desaprobación moral del club”. La escuela inglesa de las R.I. explica esto perfectamente.

Las teorías post-positivistas son importantes para deconstruir la narrativa imperialista Occidental en las R.I. Los post-positivistas no proponen casi nada, pero su crítica radical y su deconstrucción del discurso con herramientas postmodernas son muy útiles a la hora de defender nuestra identidad. Es una herramienta de ataque y defensa. Si un experto chino en R.I. llega a comprender de qué se tratan las teorías postpositivistas en las R.I., se volverá libre de todo complejo – será capaz de hablar de cualquier crítica Occidental al sistema chino usando sus propias herramientas. Este es un sector marginado de las relaciones internacionales que está creciendo en importancia. Les recomiendo dos autores que deben leer con cuidado y los cuales son muy importantes para las R.I. chinas en general: uno sería el experto australiano que ahora vive en Gran Bretaña, John Hobson y su obra La concepción eurocéntrica del mundo político. Es un antirracista, de izquierda y gramsciano, pero su trabajo es perfecto y memorable. Es aceptado como un experto normal, ya que no es muy radical, pero su trabajo es un milagro de la crítica de las R.I. al atacar todas las teorías basadas sobre una manifestación eurocéntrica y racista. Ofrece la mejor crítica del racismo que he conocido en el campo de las R.I. El siguiente es un autor más técnico como Stephen Gill y su trabajo La hegemonía norteamericana y la comisión trilateral, la cual es una aplicación de Gramsci para la deconstrucción del intento de crear un gobierno global por parte de las instituciones liberales e internacionales norteamericanas.

Pueden usar estos dos libros no solo para defender la identidad y política china, sino que les pueden servir para atacar a todos aquellos que vengan a decirles que no tienen derechos humanos, ni democracia, que son un sistema totalitario y cosas así. Simplemente basta con citar unas cuantas páginas de estos libros y sus críticas desaparecerán, porque su discurso se volverá una defensa del imperialismo, el racismo y el nacionalismo. Esto es importante desde un punto de vista teórico.

Existen algunas versiones de las teorías china de las Relaciones Internacionales. Creo que existe un camino chino a la globalización. El profesor Zhao Tingyang cree que el mundo global y el gobierno mundial deben hacerse basándose en el principio del Tianxia. No creo en ello, pero es una buena idea si ustedes insisten en su propia globalización: “Escuchen lo que nosotros los chinos – fuertes, poderosos, ricos, un poder en ascenso – tenemos que decir acerca de nuestra versión de la globalización”. Es un movimiento inteligente y un concepto muy interesante, pero apenas si puedo imaginar a los globalistas quienes tienen un entendimiento completamente diferente de la globalización puedan tomarlo en serio.

El realismo chino de Yan Xuetong no es un realismo puro. Yan Xuetong propone que un entendimiento realista del balance de poder, alianzas, deben incluir una dimensión ética, algo completamente desconocido para el realismo. Es una clase de “realismo moral” (王道外交) o “realismo ético”. Es una perspectiva realista china en la que no solo existen relaciones de poder, Badoo, sino también una dimensión ética, wangdoo.

Un análisis chino de la Escuela Británica lo proporciona el profesor Zhang Weiwei que propone su modelo chino. “Vamos tener algunas reglas de comportamiento internacional, algún club, pero no nos impongan sus reglas de un modo autoritario. Los escuchamos, estamos abiertos al debate y al dialogo” y el profesor Zhang Weiwei representa su brillantes con su viaje por el Occidente. Él explica perfectamente la identidad china sin permitir que otros lo convenzan o insistiendo demasiado en la verdad china. Esta escuela inglesa-club promueve la identidad china de un modo muy inclusivo, suave, armonioso, amable y confuciano.

Una idea interesante de Qin Yaqing insiste sobre el concepto de Guanxi de que las relaciones son más importantes que las esencias. Primero nos concentraremos en las relaciones entre países e intentar relaciones moderadas y meta-relaciones sin llegar a esencias como “bien”, “mal”, “poder real”, “poder pretendido”, etc. Sobre la base de relaciones, podemos construir un sistema de balances específico de las R.I.

Aunque no existe aún una teoría china de las R.I., existen algunas aproximaciones fructíferas.

Ahora trataremos sobre China y la geopolítica. En la geopolítica clásica, usando los mapas de Mackinder y Spykman, queda absolutamente claro que China representa el Rimland, el área costera de Eurasia. Todas las zonas del Rimland están divididas entre el área pivote, el Heartland, y el Poder del Mar. Pero al mismo tiempo, el Rimland, y China representa gran parte del Rimland, pero puede tener su propio Heartland, su propio núcleo continental, junto a su componente costero. China tiene su propio mundo al que se le puede aplicar principios geopolíticos de la misma China. Es demasiado grande para ser solo parte del Rimland. Puede ser una parte independiente del Heartland, teniendo su propio Rimland o área costera. En la geopolítica tradicional, el Heartland y el Poder de la Tierra son la Tradición, y el Poder del Mar la modernización. Lo mismo se aplica para el caso de China: el área costera china es mucho más moderna y está conectada al capitalismo, mientras su parte interior es más tradicional.

China como Rimland, es una zona donde se balancean el poder global entre dos civilizaciones, el Poder de la Tierra y el Poder del Mar, luchando ambos por controlar el Rimland desde Europa a través del Medio Oriente y Asia Central hasta China. Toda esta zona es necesaria para gobernar el mundo.

Existen dos fórmulas clásicas:

“Quien controle Europa Oriental controla el Heartland; quien controla el Heartland controla el mundo” (Mackinder). Esta versión de Mackinder dominó a comienzos del siglo XX.

A mediados del siglo XX, cuando la importancia de otras partes del Rimland llegó a ser comprendida en el proceso de descolonización, otros geopolíticos y seguidores de Mackinder, como Spykman, transformaron esta fórmula geopolítica.

“Quien controla el Rimland, controla el Heartland; quien controla el Heartland, domina el mundo” (Spykman).

Si Europa Oriental era el espacio más importante para contener el Heartland y Rusia, de acuerdo con la geopolítica global anglosajona, así que el Rimland se puede entender en un sentido mucho más amplio, pero bajo la misma lógica de oposición entre el Poder del Mar y el Poder de la Tierra.

Ahora esta sería la fórmula del siglo XXI, en el momento en que China es el poder más grande del Rimland:

“Quien controla China, controla el Rimland; quien controla el Rimland, controla el Heartland; y quien controla el Heartland, controla el mundo”.

Tenemos esta nueva definición o fórmula porque ahora China ya no es un objeto, como lo era el Rimland hace unos sesenta o setenta años, y China es gigante, un poder en ascenso que ya no es controlada por poderes extranjeros. Está fuera de duda y resulta imposible que en la actualidad que Rusia pueda pretender controlar China y no existen los deseos, la voluntad, los recursos, las posibilidades, capacidades o habilidades para hacerlo. El Occidente, el Poder del Mar, también comprende mejor que no puede controlar China.

Además, tal vez como dijo Graham Allison existe un creciente peligro de confrontación debido a que Occidente ya no controla la parte más importante del Rimland. Es un desafío serio para el Poder del Mar. Es la interpretación de Allison de la trampa de Tucídides [2].

Existe una sola cosa que puede cambiar. Si China se reconoce a sí misma como Heartland, se gobierna a sí misma y tal vez al Rimland, y quizás incluso el Heartland ruso, gobernará el mundo. Pero ahora no podemos imaginar los resultados de la ocupación, de la expansión, del imperialismo y demás. Es una decisión libre, una decisión que puede tomar China. Es muy interesante como el balance de la geopolítica ha cambiado en un siglo. Creo que el ascenso de China lo cambia todo.

China posee una dimensión de Poder de la Tierra (el Norte, el Occidente, el área rural, el Imperio Tradicional y el Partido Comunista Chino). Pero China también tiene una dimensión del Poder del Mar (el Este, la Costa, el capitalismo, el comercio, la modernización, la globalización, el proyecto G2). Tomando la dirección del Poder del Mar, China podría convertirse en parte de la construcción globalista. Pero existe también el núcleo chino, la China Central, la Tierra Media, el Reino del Medio, la dimensión Central de China es precisamente el unir estos dos lados de China – el Poder de la Tierra y el Poder del Mar. Esta es la clave de la geopolítica futura.

La hegemonía Occidental está representada por las estrategias, los valores civilizacionales, la tecnología, la democracia liberal y un tipo universal de la organización social, tales como el cosmopolitismo y el individualismo y demás. La unipolaridad es algo que sucedió después de la caída de la Unión Soviética. En ese momento, Fukuyama escribió su famoso libro El Fin de la Historia porque, de acuerdo con él, existe un solo polo, un solo sistema, una sola hegemonía y nadie puede ni imaginar desafiarlo. El momento unipolar se basó en el claro dominio de Occidente. No se trató de la globalización como la suma de culturas y pueblos llegando y viviendo juntos y compartiendo sus valores. Los valores Occidentales – la democracia liberal, el capitalismo global, el individualismo, el cosmopolitismo y la comprensión liberal Occidental del hombre moderno y postmoderno – fueron tomados como universales e impuestos a todos. El último poder global que luchó contra esto, la Unión Soviética, ha caído. Esa es la lógica de la unipolaridad.

El mundo unipolar no deja espacio para China como civilización. El mundo unipolar les ofrece a los chinos un lugar como individuos, pero únicamente como ellos entienden a los chinos: deben ser individuos esforzándose por la comodidad, una carrera, una buena vida, estándares materialistas y siendo parte del mundo global con el mismo iPhone, chaqueta, intereses, películas, entretenimiento y comida. Los chinos como individuos serán aceptados como todos los otros, pero la identidad china será rechazada. La clave para entrar en el mundo unipolar es “yo soy un individuo, déjame entrar”. No puedes unirte al mundo unipolar como un individuo chino con todo el bagaje de tu Dasein (此在), tu subsuelo existencial, tu Logos, tu Partido Comunista y Confucio.

Esta es la exclusión del liberalismo. El principal libro del liberalismo y el neoliberalismo moderno es La sociedad abierta y sus enemigos de Karl Popper. Existe la lucha de clases en el marxismo. Existe la guerra entre las razas en el Nacional Socialismo. Y existe una guerra entre la Sociedad Abierta y sus Enemigos en el liberalismo. Esto es racismo. Si eres considerado uno de sus enemigos, estarás fuera, serás excluido, te llamaran fascista, comunista, estalinista, maoísta, y demás, el Gulag y Auschwitz y demás, eres un bárbaro. Puedes entrar solo aceptando lo que ellos piensan que deberías ser, no lo que tú eres o quieres ser. Intentaran controlar tus deseos, tu voluntad, tus intereses, tus simpatías, elecciones y demandas. Deberás seguir sus leyes, protocolos, sistemas y solo después de eso serás “un amigo de la Sociedad Abierta”. La Sociedad Abierta es un concepto excluyente.

¿Cuál es la diferencia? Los fascistas miran positivamente a los otros fascistas. Los comunistas consideran a otros comunistas amigos. Si los liberales consideran a otros liberales como sus amigos, entonces es igual. Pero los fascistas comenzaron a destruir otras razas, considerándolas subhumanas. Los comunistas, en nuestra experiencia, destruyeron a millones de personas de nuestra población, considerándolos burgueses o no revolucionarios. Los liberales han destruido a los enemigos de la Sociedad Abierta al bombardear Libia, destruyeron Irak y otros lugares. Todos los que se oponen a la Sociedad Abierta deben ser eliminados, destruidos, asesinados. No es nada nuevo, tal vez sean algo más o menos humanos, pero debemos comprender el significado verdadero de la unipolaridad y que es la hegemonía Occidental. Tal vez aparentan ser amigables, pero llevan un cuchillo detrás. Al menos debemos entender esto.

Aquí podemos ver la versión ligera de la unipolaridad. Occidente le propone a los otros poderes, Europa y China, que sean amigos, como en el G2 o el concepto de la OTAN. Pero, ¿qué les espera a las otras partes del mundo? Un caos sangriento, guerras civiles, fuerzas de radicales políticos y extremistas religiosos, asesinatos – esto ya está pasando en el Norte de África. El mismo destino le espera a Rusia en los escritos de Zbigniew Brzezinski, quien decía que Rusia debía ser balcanizada. Cuando Bush fue a Moscú una vez a comienzos del año 2000, él le dijo a Putin: “Por favor esperen, ustedes tendrán la misma democracia que Iraq”. Eso fue al mismo tiempo cuando los Estados Unidos estaba en proceso de matar a cientos de miles de personas en ese país. Putin quedó sorprendido porque imaginaba el futuro de Rusia diferente. Pero eso da una idea de que le sucederá a las áreas fuera de estas zonas – una especie de caos manipulado.

China tiene tres caminos para lidiar con la hegemonía.

  1. Pueden aceptar la hegemonía Occidental, lo cual no es extraño, creo. Desde que el concepto de Deng Xiaoping era una transformación de la sociedad china que se sumergía en la sociedad de consumo, el modo de vida Occidental y el capitalismo y la globalización, conduciendo hacia la aceptación final de la hegemonía Occidental. Si no nos interesa la identidad china, tal vez aceptar la hegemonía Occidental es la solución o al menos una opción. Si cada chino acepta esta sociedad global, con algunas habilidades y talentos solo para los chinos, pero sin identidad china. Algunos se preocuparán de la identidad china y su soberanía; otros no. No creo que haya muchos de ellos, pero teóricamente esto puede ser así, porque la hegemonía no solo es una estrategia de dominación Occidental, se trata también de sus valores y estándares. Así que un liberal en la sociedad china puede ser identificado con alguien pro-Occidental, pro-Popper, pro-Soros. Especulo que existen algunas estructuras educativas, profesores y tendencias en este sentido – tal vez no sean dominantes porque ustedes tienen el Partido Comunista, el principal guardián de la identidad china y del actual Logos y de la tradición. No importa que tomes un poco de veneno, y el veneno puede ser muy efectivo en algunos casos.
     
  2. Ustedes pueden afirmar y desarrollar la hegemonía regional china. Esa sería una tendencia realista, nacionalista. Podríamos llamar a esto Badoo, con algo de wangdoo para tener una dimensión ética. Ese sería el camino de China. Pero pienso que este es el mejor camino para China al considerar su hegemonía. Se puede decir que su hegemonía se ejercería sobre un área mayor o menor, tal vez en algunos lugares fuera de los límites de China e incluyendo otros espacios, pero ustedes también pueden hacerlo de modos distintos – en algunas ocasiones de modo político, en otras de modo económico, una tercera forma sería la hegemonía cultural. La hegemonía no es mala en sí misma. Pero lo más importante es tener un modelo hegemónico. El balance es una parte de la identidad china. La hegemonía china debe estar basada en su propio carácter e identidad, y no en las reglas de una hegemonía universal.
     
  3. Finalmente, pueden intentar llevar la hegemonía china a escala planetaria, proponiendo una globalización china. He visto este miedo o idea en varios expertos de los Estados Unidos, Occidente y Rusia sobre este mito de la globalización china. Tal vez ustedes no tengan ninguna idea o proyecto de imponer su hegemonía a escala planetaria, pero otros creen que tienen esos planes. Necesitaran aceptarlo, porque si alguien cree que hay algo, significa que a nivel social existe algo, tal vez solo a nivel de sus ideas, pero así es como se le da forma al mundo – es la proyección de nuestros pensamientos. No deben decir que no tienen una idea de que es la hegemonía. Existen muchas personas en otras culturas que piensan que tienen esa idea. Necesitan tomar eso en cuenta. Si saben que existen esas personas, ustedes deben hablar con mucho cuidado con ellas. Deberán promover su propia versión teniendo en cuenta cómo ven a China.

La teoría del mundo multipolar, principalmente desarrollada por nosotros en Rusia, por la escuela Eurasianista y por la escuela rusa de geopolítica, significa aceptar las diferencias entre diferentes civilizaciones. Las civilizaciones son el actor principal de las R.I., no el Estado. La diferencia aquí es de una enorme importancia. Por ejemplo, si nosotros desarrollamos las ideas de Huntington y reconocemos que son las civilizaciones y los grandes espacios los actores principales, entonces tenemos una perspectiva completamente diferente del sistema de las R.I. la cual no está presente en los manuales de las R.I. Esto no sucede únicamente porque esté en su primera fase, sino porque contradice la comprensión globalista y Occidental.

¿Qué es una civilización? Es un absoluto relativo, o un aspecto de lo absoluto. Me gustaría ampliar esta definición. ¿Qué es lo que significa ser un aspecto de lo absoluto? Significa que es absolutamente absoluto – pero no está solo. Si eres total y completamente chino, podrás entender algo o alguien quien no es chino solo si estas lleno de esta dimensión absoluta de la identidad. Entonces, es desde el centro, no desde afuera, que podrás entender al Otro. Es la única forma de conseguir una verdadera globalización”, la verdadera comprensión del otro comienza con nosotros mismos. Si no nos comprendemos a nosotros mismos, no podemos tratar apropiadamente a los Otros. Entonces seriamos solo medio chinos, medio rusos, medio ingleses o medio alemanes. El verdadero alemán debe estar basado en el Dasein alemán (Ser-ahí), el Logos alemán, la Tradición alemana, la Identidad alemana. Solo en lo más profundo, en el centro de nuestra identidad, podremos comprender a los otros.

Nuestros problemas no parten de darnos cuenta de nuestra identidad, sino cuando creemos que ya sabemos cuál es esta identidad, cuando en realidad apenas estamos a mitad del camino. Las personas que acabaron de convertirse a una nueva religión son más radicales y fanáticas que las personas que han vivido en esa religión toda su vida. Es una especie de reacción a lo “más próximo”. Nacionalismo, racismo, xenofobia, odio al Otro, solo son posibles estando a medio camino de uno mismo. Cuando realmente llegamos a nosotros mismos, ya no podemos ser xenófobos, nacionalistas o racistas. Cuando descubrimos nuestra identidad por completo, nuestro yo, somos más abiertos hacia los otros, porque nosotros consideramos, por ejemplo, que Rusia no es el absoluto, sino que siendo más y más rusos, descubriendo más y más profundamente la identidad rusa, nosotros llegamos a lo absoluto. Llegamos aquí al punto central, encontrando el verdadero, perfecto y absoluto chino. El absoluto chino se encuentra con el absoluto ruso en el centro de su civilización. Podríamos comparar a Lao Tsé o Confucio con Dostoievski o la tradición cristiana ortodoxa rusa. Al darnos cuenta de los aspectos relativos de lo absoluto, llegamos al punto de encuentro de las civilizaciones – no desde afuera, no siendo destruidos como unidad cultural y fragmentados como individuos. Un individuo no puede ser comprendido por otro individuo, porque el individuo puro es la forma más “primitiva” del ser, completamente limitado a sus simples deseos. El individuo es como un robot, un hombre sin tradiciones o identidad es como un robot, un simulacro de hombre.

La civilización debe ser entendida en plural. Existen la civilización china, rusa, europea, islámica, africana, latinoamericana y Occidental, que pueden interactuar, coexistir pacíficamente, intentar cambiar sus identidades. Por ejemplo, para volverse ruso, puedes venir a Rusia, aprender nuestro idioma, aceptar nuestros valores, si tú quieres o no tienes. Este concepto de civilización es inclusivo. Pero no podemos proponer una única civilización para toda la humanidad. Tal vez sea el resultado de lo Absoluto, cuando todos lleguen al centro de sí mismos, y lleguemos al punto donde convergen todas las civilizaciones, hasta entonces tenemos un largo camino por delante. Ese es el principal significado del mundo multipolar.

Un polo es un Gran Espacio + civilización, una idea + poder, autarquía + soberanía, hegemonía + cultura, fuerza + autoridad. Existen teorías formales para comprender que es un polo en la teoría del mundo multipolar.

Entonces, ¿cuál podría ser la versión china del mundo multipolar? Esto significa aplicar los mismos principios para el caso chino. China es identidad + soberanía. Si expandes demasiado tu soberanía, puedes perder tu identidad, y si extiendes solamente tu identidad cultural, puedes perder la capacidad práctica de defender su soberanía. China debe unir la identidad y la soberanía, y eso es lo que está haciendo ahora la China actual y lo que Xi Jinping quiere hacer. Esa es la Gran China, el Sueño Chino.

China es una civilización, que debe ser afirmada. Existe el peligro de que, si ustedes se olvidan de esto, sean tratados como población, como masa y como individuos. Pero ustedes deben promover educadamente su civilización como tal. Ustedes deben llamarse civilización.

China posee una hegemonía sobre el Sur de Asia y el Lejano Oriente – y más allá tanto y como su poder, voluntad y capacidad les permitan expandirse. Pero esto debe ir unido a su comprensión de la justicia y el balance. Si se expanden mucho, pueden sobre-extender su hegemonía. A la hegemonía es necesario ponerle límites. Ese fue precisamente nuestro caso. De vez en cuando, los rusos sobre-extendimos los límites de nuestro imperio y fuimos incapaces de controlarlo. Solo debemos expandirnos dentro de los límites que podemos asimilar, dominar, administrar, al igual que desarrollar nuestras relaciones con quienes se pueden unir a nosotros – siempre debemos darles algo, no humillarlos. Pienso que esto es importante al tratar con el Sinkiang y con el Tíbet. Deben mantenerlos bajo su control, pero deben comprenderlos como el Otro e incluirlos de algún modo. Las demandas se actualizan y ajustan.

China es mucho más que un Estado y aquí es donde el concepto de Zhao Tingyang es de importancia radical: afirmar China como Tianxia. El crecimiento de este Tianxia debe ser armonioso. Podrían decir: no comencemos con lo global, sino con lo regional, vamos a poner en práctica la instalación de la Ruta de la Seda, vamos a instalarlo y mostremos cómo funciona, y si la humanidad es seducida por el Tianxia en este momento, tal vez otros puedan aceptarlo. La importancia de este comienzo para China está dentro de las posibles capacidades para introducir estos conceptos basados en relaciones, justicia, ética y hegemonía. China debe ser reconocida como un polo en todos los sentidos. Ya tienen los aspectos básicos de una versión china de la teoría del mundo multipolar.

Aquí vemos las un mapa básico de las civilizaciones que tarde o temprano serán los polos del mundo multipolar. Algunos de ellos ya existen, como Occidente o la civilización europea si se afirma como un polo independiente fuera de la hegemonía norteamericana globalista, y existen los mundos euroasiático, chino e islámico – el último está intentando afirmar su identidad, pero sin éxito – y África.  Es muy interesante que el pensamiento del mundo multipolar en Suramérica este muy desarrollado. Existen muchos teóricos allí, muchos partisanos de la teoría del mundo multipolar y de la identidad Sur o Latinoamericana.

La teoría de las Relaciones Internacionales china puede basarse sobre la multipolaridad. En ese sentido, todos los otros factores que he mencionado pueden jugar un papel importante. La teoría del Tianxia aplicada a una escala original puede crear este polo constante. La teoría del realismo moral de Yan Xuetong puede aplicarse a China no solo como país, sino como civilización, y aquí es aplicable la idea de la ética, adquiriendo más poder con su significado implícito. Existen analogías con la escuela británica, con la relativización de las reglas Occidentales para el club en el cual China podrá dar sus propias reglas al club al que China quiera pertenecer. En la situación actual, el G7 es un club Occidental que impone reglas que son extrañas a la cultura china. Aquí los conceptos de Zhang Weiwei y Qin Yaqing pueden ser muy útiles.

Aquí podemos ver el comienzo del mundo multipolar en la forma del 4+.

Si China se posiciona del lado del Poder de la Tierra, entonces el orden mundial ya es multipolar. No estamos tan lejos de la multipolaridad. Si China escoge la multipolaridad, no significa necesariamente una alianza con Rusia. China puede ser un Heartland por sí mismo, al igual que Europa puede ser un Heartland continental como en la geopolítica clásica, y existe el futuro del Heartland ruso. Estos tres Heartlands pueden cooperar y crear una multipolaridad muy pronto. Es una invitación para otras civilizaciones.

Y al final el axioma geopolítico del siglo XXI es: “Quien controla China, controla el Rimland; quien controla el Rimland, controla el Heartland; quien controla el Heartland, controla el Mundo”.

Nosotros, los rusos, no podemos cambiar nuestra posición en el espacio geopolítico. Podemos existir como Eurasia, como Heartland, o podemos no existir. No tenemos elección. Resulta difícil para Europa tomar una decisión en la actual situación con sus actuales élites. El único gran poder que puede hacer una elección en la situación de hoy y tiene suficiente poder para hacerlo es China. China tiene la elección como Rimland. El Heartland no puede. Estados Unidos no puede, aunque esté intentando abandonar la globalización y el Poder del Mar con Trump – no Trump mismo, sino sus palabras y los votos por él – el pueblo estadounidense que intenta salir de este concepto de la globalización para reafirmarse a sí mismos como polo norteamericano y no como polo global. Esos son buenos signos. Pero solo China puede de verdad tomar una decisión.

China tiene tres decisiones o soluciones para esto.

China puede ser controlada por los EE. UU/OTAN. Significa que el Occidente dominará el Rimland, el Heartland y el Mundo. Si los globalistas consiguen promover su control sobre China a través de la globalización, influenciando a las generaciones más jóvenes, la tecnología, el capitalismo global y las teorías liberales, entonces dominaran el mundo.

En la antigua versión de la geopolítica, China podía ser controlada por Rusia (Heartland). Esto es absolutamente imposible hoy. No era imposible en el tiempo de los Zares, incluso en la época soviética, cuando Stalin ayudó a Mao y Rusia a China. Pero hoy ya no existen los medios, la voluntad, el deseo, las posibilidades o recursos para eso. No podemos controlar a China. China es tan grande y tan desarrollada que esa pregunta está fuera de lugar. Nuestra debilidad es por lo tanto buena para la multipolaridad. Sí lógica y racionalmente ya no temen más a Rusia, podrán aceptarnos libremente ya no como amenaza sino como aliados, no tan asimétricamente como antes. Los turcos lo han entendido. Los turcos cometen errores de vez en cuando, pero entienden que Rusia ya no es una amenaza, y se han vuelto muy “pro-rusos” en muchas cosas. Sería bueno que China aprendiera de esto.

Finalmente, China puede ser controlada por China misma. En este sentido, China debería hacer énfasis en su identidad de Heartland, su identidad tradicional representada hoy por el orden social chino del Partido Comunista.

Si la elección es hecha en favor de China, eso significaría la multipolaridad. Por otro lado, Occidente propone su propio sistema de valores, identidad, civilización, mientras por el otro el Heartland ruso no propone nada asimétrico. Rusia no propone nada, salvo que China se Vuelva China de Nuevo y Hacer a China Grande una vez más.

Notas:

[1] Daniel A.  Bell, The China Model: Political Meritocracy and the Limits of Democracy, Princeton University Press, 2015.

[2] Graham Allison, “The Thucydides Trap: Are the U.S. and China Headed for War?”, The Atlantic (24/9/2015).